España
‘El problema de España no reside tanto en la nación cultural española sino en los nacionalismos periféricos que en lugar de superar el nacionalismo español de finales del siglo XIX y de buena parte del siglo XX, lo mimetiza, lo reproduce en los mismos defectos’
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Joseba Arregi, ex consejero de Cultura del Gobierno autonómico del País Vasco, ensayista y presidente de Aldaketa, en un artículo publicado este miércoles en El Mundo:
‘[…] El término nación comienza a ser utilizado políticamente con el liberalismo, con la revolución liberal en Europa. Por eso es el concepto de nación en sus comienzos un concepto revolucionario. Como bien explica José Álvarez Junco –Mater Dolorosa-, los problemas de España para consolidarse como Estado nacional tienen que ver precisamente con las dificultades de los conservadores para hacer suyo el concepto de nación, que, por sus orígenes, les resultaba extraño. Cuando los conservadores hacen suyo el término es cuando España da un salto importante en su consolidación como Estado nacional.
Nación en el sentido liberal, revolucionario, es un concepto eminentemente político. Define a una comunidad política. Es la sociedad que se constituye en comunidad política para actuar como un sujeto político colectivo en virtud de su propia voluntad, y que queda representada en las instituciones decididas por la voluntad popular. Rompe con la encarnación de la nación por el monarca, por el rey.
[…] Esta dimensión política se da ciertamente en sociedades que luego han sido culturalmente homogéneas, aunque en el momento en que se constituyeron como comunidad política no lo fueran. Esta realidad, ocultada por el devenir, convertido en mito, de Francia como paradigma del Estado nacional, debe ser rescatada para entender lo que significa la nación política: una comunidad en la que lo que une a quienes la conforman es la idea de ser ciudadanos, sujetos de derechos, y no pertenecientes a una comunidad lingüística o cultural. La Francia de la revolución francesa era una sociedad en la que convivían más de 90 lenguas y patois, y hay quien afirma que la definitiva homogeneización cultural y lingüística de Francia no se produce hasta 1918, sobre la fuerza de la frase mort pour la patrie: habría sido la experiencia de la Gran Guerra, como la siguen llamando los franceses, la que habría hecho la homogeneidad de Francia y de los franceses.
[…] La comunidad política de la nación liberal es ahora una comunidad en la que al ciudadano se le sobrepone y se le impone -el imperialismo es de doble dirección, hacia fuera y hacia dentro de la propia sociedad- una identidad cultural, un sentimiento de pertenencia colectiva marcado por una misma lengua, una misma tradición, una misma cultura y una misma identidad. Esta fusión de concepto político y de concepto cultural es la semilla de la tragedia de Europa en el siglo XX.
[…] El problema de España no reside tanto en la nación cultural española sino en los nacionalismos periféricos que en lugar de superar el nacionalismo español de finales del siglo XIX y de buena parte del siglo XX, lo mimetiza, lo reproduce en los mismos defectos. Por eso, el problema del reconocimiento del plurinacionalismo de España no está en el Estado, sino en los nacionalismos catalán y vasco y el socialista vasco Jesús Eguiguren, que son incapaces de pensar Euskadi y Cataluña como entidades a su vez plurinacionales.
[…] España no necesita volver a un nacionalismo político-cultural cuando puede desarrollar un nacionalismo patriótico y un patriotismo constitucional eminentemente político, que sin negar la existencia y las grandezas -y miserias- de la tradición española, se enorgullece con razón de la conquista política y democrática llevada a cabo con la Constitución de 1978 que implica su constitución como comunidad política integrando e incluyendo distintas lenguas, identidades, culturas y pueblos. Nada más grande que este nacionalismo político, que esta idea de Nación política superadora, que no negadora, de identidades y culturas.
[…] Como escribe acertadamente Maurizio Viroli –Por amor a la patria-, nada hay más grande que estar orgulloso de las reglas, leyes y normas que aseguran la convivencia de los distintos individuos en paz. Eso es la nación política, eso es la democracia, esa la gran cultura constitucional que nace con la revolución francesa y para cuyo abandono no existen razones de peso’.
Siempre hay que escuchar con atención al Profesor Arregi, intelectual y humanista sin parangón. El nacionalismo es un movimiento tribal que nada tiene que ver con el humanismo racionalista que durante tantos años ha tenido que sufrir los estragos de un mundo y unas sociedades acostumbradas a seguir proclamas identitaristas, cuando no abiertamente racistas y totalitarias. El hecho de que países cultos como Alemania hicieran lo que hicieron es un llamado a la naturaleza humana, pero está visto que repetimos problemas como el animal que tropieza dos veces en la misma piedra.
El único consuelo que me queda es que los que quedamos como críticos de tales sistemas simplificadores de la naturaleza del hombre existimos, aun en las catacumbas, pero sobrevivimos.
Y por eso hay que dar gracias a medios como LA VOZ DE BARCELONA.
Una opinió més d’un de l’atre costat, si ens tinguessim que preocupar per tot el que diuen els “boceros” de les espanyes, no fariem altra cosa
¿Para que razonar, si se puede vivir solo de sentir?
Barcelona is not Catalonia
Tiene toda la razón. Los nacionalistas son intransigentes, intolerantes con la pluralidad, cada vez más totalitarios, incultos y reaccionarios. Cada día se parecen más a la imagen esterotipada que tienen del resto de los españoles, y menos a la imagen idealizada que tienen de sí mismos (el catalán culto, trabajador, progresista y abierto existe, pero cada vez menos. Está mal visto.)
catalonia is not Spain,
“Boceros”? Deus voler dir voceros, que ve de voz. Ostra, em decepciones xaval, jo pensava que els catalans sabien més espanyol que els de Salamanca o Burgos (Mas dixit). Però, tu sembla que no…
El dia que reclamen autodeterminación cada uno de los antiguos condados catalanes, forme una cadena y Cataluña se rompa,lo comprenderán.Con estas mentes..tiempo al tiempo.
Hispaniadeleste, mientras el nacionalismo reclama “democracia” para sus empeños colectivistas, se muestra como es ante cualquier deseo de sus comunidades de desagregarse: agresivo y totalitario. Que se lo digan si no a los navarros y a la campaña financiada por el nacionalismo vasco para difundir su pensamiento en la comunidad foral.
Eso es precisamente lo que alerta Arregi: pretenden vender como algo “bueno” y “progre” lo que en realidad es un paso atrás fundamental en el desarrollo del humanismo en nuestro continente, que es el alentamiento de políticas autárquicas, aunque sólo sean culturales o mentales.
No a las fronteras, sean físicas o mentales. Y punto.
Jo visc el nacionalisme català com ell descriu l’espanyol, i l’espanyol com ell descriu el català. Sembla que es vulgui justificar i dir: ok, també som nacionalistes però el nOstre nacionalisme és millor. La Constitució semblava que havia de ser una cosa i n’ha acabat sent una altra, injusta, que no reconeix jurídicament a cap d’aquests pobles que esmenta, i mira de mutilar la seva segona llengua deixant-la al albur de la cojuntura política. Així van votant bascs i catalans a qui voten. Potser no és culpa nostre només. Potser s’adoctrina per tal de crear confrontació sobre per què fem el que fem enlloc de donar a conèixer les nostres inquietuds amb equanimitat i sense mentir.
Lo curioso es que todos firmaron una Constitucion que no admite mas nacion que España.La Constitucion de 1978 atiende a los intereses nacionalistas en el tema de reconocer la lengua regional y un gobierno regional,aparte de esto,no reconoce nada mas y el nacionalismo,no ha cambiado nada,todo lo contrario,han utilizado el poder para actuar como el regimen de franco.Lo increible es que ningun Gobierno hasta ahora ha obligado cumplir la Constitucion,teniendo poder para hacerlo.
Mes aviat em sembla que el problema d’Espanya es que un cony d’invent castellà imposat per la força de les armes. Deixeu-vos de collonades i digueu les coses pel seu nom.
El castellano es la principal lengua de cataluña. Y eso es lo primero que se debería decir en el Estatuto. Por lo menos, si se respeta el democrático criterio del número. Lo contrario es pensar que unos ciudadanos tienen más derechos que otros.
“nada hay más grande que estar orgulloso de las reglas, leyes y normas que aseguran la convivencia de los distintos individuos en paz”
Si muy bonito, si no fuera que la nación española está sustentada por represión, intento de silenciar otras sensibilidades, etc… Acusan a los demás, cuando en España se sigue aplicando ese nacionalismo XIXesco, pero en gran parte étnico, no hace 50 años no, ahora mismo. Se capa cualquier iniciativa internacional que no sea estrictamente española-castellana.
“No a las fronteras, sean físicas o mentales. Y punto.”
Venga ya, menuda hipocresía, lo de las fronteras. Quítate tú tus fronteras y yo me quitaré las mias. Por ejemplo quitate la frontera de Melilla. ¿Ah, esa no, verdad? Es que hay fronteras buenas y malas, las buenas son las que me convienen a mi, donde ya domino, no necesito fronteras.
Kafka, Catalunya no es només el setge castellà al voltant de Barcelona. fot-li un cop d’ull a Osona, Plà de l’estany, Priorat, Berguedà, Garrotxa, Conca de Barberà, etc..
Bernat si fem un cop d’ Ull a esas comarcas, nos damos cuenta de que son cuatro pelagatos que viven de lo que pagan los españolitos del cinturón de Barcelona
“Lo contrario es pensar que unos ciudadanos tienen más derechos que otros.”
Aquí els únics que tenen més drets són els que no parlen català, que no estan obligats per la constitució a coneixe’l, mentres que TOTS els espanyols tenim el castellà com a únic deure lingüístic.
Aixó s’ha d’acabar. Tard o d’hora.
“els catalans sabien més espanyol que els de Salamanca o Burgos (Mas dixit)”
Aixó mai ho ha dit el Mas
La Historia de Europa en el siglo XX deja bien claro que los nacionalismos identitarios psicoculturales conducen al enfrentamiento y a la destrucción. En el siglo XXI esos nacionalismos, todavía presentes en varios estados, son una amenaza de fracaso para la Unión Europea. Por eso no tienen futuro, si ha de tenerlo la UE. El mundo globalizado solo puede funcionar bien con naciones de ciudadanos, no con naciones identitarias. El NACIONALISMO será sustituido por el CIUDADANISMO.
Exacto, España es una nación plurinacional, y Cataluña y Euskadi también: “que son incapaces de pensar Euskadi y Cataluña como entidades a su vez plurinacionales.”
Telerin, dona-li una ullada al “pérfido” estatut d’autonomia de Catalunya:
Article 11. L’Aran
1. El poble aranès exerceix l’autogovern mitjançant aquest Estatut, el Conselh Generau de l’Aran i les altres institucions pròpies.
2. Els ciutadans de Catalunya i les seves institucions polítiques reconeixen l’Aran com una realitat nacional occitana fonamentada en la seva singularitat cultural, històrica, geogràfica i lingüística, defensada pels aranesos al llarg dels segles…
De moment, per tant, no crec que desde Madrid ens tinguin que vindre a donar lliçons de reconeixement de la plurinacionalitat interna de Catalunya, més tenint l’historial que tenen en quan a tracte de les minories culturals i lingüístiques. I es que els Bolivar, San Martín, Martí, Rizal o Abd el-Krim ho tenien més clar que l’aigua quan van decidir donar una patada al cul als “conquistadores”.
“La Historia de Europa en el siglo XX deja bien claro que los nacionalismos identitarios psicoculturales conducen al enfrentamiento y a la destrucción”
Al segle XX hem vist com avançava Europa amb el reconeixement de les nacions dels polonesos, estonians, irlandesos, eslovens, noruecs, finlandesos, etc…. en contra dels miserables nacionalismes imperialistes que les “poseien”.
Ara tots conviuen en pau en una Europa en construcció entre iguals.
Els catalans no tenim cap obligació de seguir acotant el cap front un dels nacionalismes més cafres que queda al continent, que ens vol sotmesos.
Ni ho voliem al segle XVIII, ni al XIX, ni al XX, ni al XXI.
No ho heu aconseguit. No ho aconseguireu MAI.
Si toda la plurinacionalidad que encuentran en Cataluña es la del Vall de Arán, apaga la luz Mari luz, que esta gente de lista solo tiene la apariencia.
“Ni ho voliem al segle XVIII, ni al XIX, ni al XX, ni al XXI.
No ho heu aconseguit. No ho aconseguireu MAI.”
És mentida.
Ho van aconseguir al XVIII, ho van aconseguir al XIX i ho van aconseguir al XX. I ara, malgrat els valents segadors que es limiten a insultar i amenaçar còmodament asseguts davant del seus ordinadors, tot apunta a que ho tornaran a aconseguir al segle XXI.
Més que res perquè aquesta terrible opressió que perceben alguns paranoics no és compartida per la immensa majoria de la població.
Conozco personas de otros países, y ninguna de ellas duda de si Suiza, Alemania, Francia, Italia, Portugal es o no es, si ellos son de allí o de allá.Esto del catalanismo-separatista, es algo muy ” especial “.Sencillamente se lo han sembrado en la Escuela y las excursiones al campo bajo el régimen del Sr. Pujol, de parece que imitaba a Franco.Debía ser que en el fondo le admiraba.Y organizó la ” cruzada catalanista “, con la ” inmersión lingüistica.
Cuando le llegue el final, tal vez se arrepentirá de la que ha organizado, queriendo separar a pueblos hermanos.
Por fin un poco de lucidez. Da gusto leer este tipo de reflexiones inteligentes.
“La Historia de Europa en el siglo XX deja bien claro que los nacionalismos identitarios psicoculturales conducen al enfrentamiento y a la destrucción”
Existen nacionalismos identitarios como una auto-defensa a la agresión, es un sarampión de autodefensa. Por ejemplo el predominio serbio en Yugoslavia, o el ruso en Lituania. Analiza y dime tú lo que conduce en el fondo al enfrentamiento. Yo creo que es la desigualdad, explotación y la injusticia previas. En estos casos el nacionalismo es una reacción de defensa.
A ver, Tadeus, la desigualdad, injusticia y explotación fomentan el nacionalismo según tú ¿no? Pues entonces ya sabemos de donde viene el anti-nacionalismo catalán, porque si aquí estamos discriminados y maltratados, podrías ir a vivir unos meses a Extremadura, Castilla La Mancha, Andalucía,… y verías las diferencias que hay con respecto a Cataluña. Podrías hacer la prueba e intentar ir al ambulatorio, mirar en qué fecha se hicieron las primeras autopistas, etc. Por no remontarnos a unos pocos años más atrás y hablar de arenceles, prohibiciones, etc.
Y a mi que me cuentas Jorge. Cuéntase a los andaluces y extremeños. Que se rebelen si creen que viven en la injusticia. Tu les dirías que no, supongo, que peor vivian los esclavos en tiempos de los romanos y por tanto sus reivindicaciones nacionalistas son frivolas.