Cataluña
“Si [la izquierda catalana] no sumamos, y el centro-derecha suma, aquí hay Gobierno de CiU para los próximos tres siglos”
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Josep-Lluís Carod-Rovira, vicepresidente de la Generalidad en funciones, este miércoles en declaraciones a COMRàdio:
“En el centro-izquierda catalán hay una diversidad de opciones [mayor que en centro-derecha], entre otras cosas, porque yo creo que es demasiado víctima de su tradición antifranquista. […] Es muy importante que la izquierda catalana no sea autista y que mire lo que está pasando en Europa. Lo cierto es que aquí la izquierda todavía no se ha rehecho de la caída del muro de Berlín y del bloque del Este. Todos los partidos socialdemócratas mediterráneos han tenido dirigentes en la prisión por corrupción. Alguna cosa ha pasado. Aquel proletariado mítico que era el que tenía que resolver las cosas, ha desaparecido.
[…] Hoy, el gran problema que tenemos las izquierdas europeas es la incomodidad ante ciertos temas de la cotidianidad. A la izquierda, le hablan de familia y no sabe que decir. Parece como si la gente de izquierda no tuviese familia. Le hablan de seguridad y, a veces, parece que simpatices más con el ocupa que con el policía que garantiza bienes, derechos, libertades y vidas de las personas. Hablas de empresa, y la empresa es solamente el marco de reivindicación laboral permanente y no un lugar de creación de ocupación y de riqueza. A la izquierda le cuesta tener un discurso sobre el individuo. Aquí el individuo es importante, para cierta izquierda, en la medida que forma parte de un colectivo mayor, es decir, de una nación o de una clase social.
[…] El error que cometeríamos [en la izquierda] sería seguir concibiendo la política solamente en clave de partido o como suma de partido. La sociedad civil tiene que tener la capacidad, si quiere, como en la Asamblea de Cataluña o en la Entesa de los Catalanes de las elecciones al Senado del 77, de generar un espacio de complicidad de sumas, donde no todo el mundo piense lo mismo, […] porque si no sumamos, y el centro-derecha suma, aquí hay Gobierno de CiU para los próximos tres siglos. Por tanto, quien crea que en solitario puede ser hegemónico, que se lo haga mirar”.
Igual le da “arre” que “so”.
Me lo decía el corazón, que el que será cesante Vicepresident de la Generalitat no cejaría en proponer para los que comulgan con doctrina propia un sinfín de subvenciones públicas. Del mismo modo, estaba cantado, merced a su buen oficio, que recorrería las siete partidas de un extremo a otro del orbe sin dejar apenas tiempo para dejarse caer por casa siquiera a cambiar las mudas de su valija diplomática. Figuras de semejante calibre entran pocas en el quintal de la Historia, es por ello que se hizo perentorio rodearlo de patriotas de total confianza para tratar de hacer omnipotente la presencia de Catalunya en el Mundo a la manera de los virreyes de antaño. No es que pretenda ser el laurel de todas las salsas sino que se debe en cuerpo y alma a la observancia estricta del Estatut de Autonomía. De ahí se desprende ese llover a más y mejor las contribuciones, donativos y sostenes gubernamentales a organizaciones privadas de aquí pero también de acullá. En su obsesivo proceder, está siempre ras con ras “llengua pàtria” y “sobirania” del mismo modo que se codea la leche con el caldo de teta. En el tramo final de su mandato, viene rompiendo las cinchas para mejor dejar limpios los arcones públicos de polvo y paja: la friolera de casi nueve millones de euros aventados en la dirección pretendida. Las juventudes de su partido político, por chiripa, han sido agraciadas por enésima vez, ¡cosa excepcional!, con otro buen pellizco. Pero… no monten en cólera… quién les ha venido con el cuento de que estos son los incívicos que armados de botes de pintura y aerosoles nos dan la vaya practicando el arte parietal sobre lienzos de nuestros muros en pueblos y ciudades, estampando consignas independentistas firmadas con la misma sigla (JERC). De ser así, lo mismo, sin comerlo ni beberlo, nos acaban colgando el sambenito de cornudos y apaleados. Vaya, que, vacío ya el erario público, nos ponen en el brete de emitir otra remesa de bonos patrióticos, a altísimo interés, para pagar el adecentamiento de la cromática fiesta… ¡bueno va el óleo en Catalunya!
Yo creo que a Carod le parece poco que haya centro derecha catalanista gobernando en Cataluña para tras siglos. A él le gustaría más un catalanismo gobernando en Cataluña MIL AÑOS. un período al estilo de lo que se propuso en Alemania en los años treinta.
Porque para él la división en política no es izquierda y derecha por mucho que nos lo quiera hacer parecer. Es catalanismo o lo que él llama españolismo. Y por el catalanismo su partido pactará con ese Centro Derecha. A menos que consiga que el PSC rompa con el PSOE y puedan disputarles el poder. En ello están.
Obviamente antes que votar españolismo de izquierdas votaremos catalanismo de derechas con la nariz tapada si hace falta.
El españolismo es una anacronía a erradicar de Catalunya. Y jamás gobernará ,por un simple razón, los primeros en no quererlo son los descendientes de los inmigrantes de las otras españas. Pero si es un gas molesto y maloliente que hace irrespirable el aire que nos rodea.
Pero Carod tiene toda la razón. Hace falta un partido de izquierdas catalán que destierre para siempre cualquier veleidad españolista y que compita exitosamente con la derecha.
En el PSC tienen que hacer una profunda reflexión y separarse del PSOE.
Con un PSOE, un PP , Ciutadans UPyd y demás, todos en el mismo saco y compitiendo por el voto anticatalán, la visualización del enemigo a batir será mucho más clara.
En eso tiene razón. La izquierda actual solo tiene 51 escaños en el parlamento catalán (28+10+10+3).
Obviamente antes que votar las izquierdas votaremos catalanismo de derechas con la nariz tapada si hace falta, por lo de la corrupción. A los catalanoparlantes nos va el euro.
Votarán con la nariz tapada y como quieran pero el que dice ser de izquierdas y catalanista no hace falta que se tape la nariz. La tiene tapada hace mucho.
Ah, ¿pero la izquierda en CAT existe?
Y si no, también, porque, ¿qué izquierda es esa, como la de Carod- que antepone territorios y sus mitos a los ciudadanos? Sr. Carod, lo suyo es derecha pura y dura… eso sí, enmascarada.