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‘Ni en el ámbito judicial, ni en el mediático, ni en el social somos capaces de mostrar una fortaleza digna de los embates que padecemos, y así, por arte de perseverancia, la lluvia fina va calándonos hasta los huesos. Y, por el camino de diluir nuestra catalanidad, nos va haciendo cada día un poco más españoles’
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Pilar Rahola, periodista, el 18 de diciembre de 2008 en el diario Avui:
‘El hecho de que todos estos ataques básicos consigan su objetivo y que no seamos capaces de defendernos nos da la medida de nuestra extrema debilidad. Hoy por hoy, somos un país incapaz de parar ni un solo ataque contra nuestra identidad, y los goles van entrando en la portería mientras el equipo de casa lo mira con la triste mirada del que recibe todos los golpes. En algún momento de la historia reciente -que los historiadores harían bien en radiografiar con su precisión cirujana- perdimos la capacidad de ser respetados, y hoy todos se atreven con Cataluña. Al fin y al cabo, ¿tenemos capacidad de respuesta?. Ni en el ámbito judicial, ni en el mediático, ni en el social somos capaces de mostrar una fortaleza digna de los embates que padecemos, y así, por arte de perseverancia, la lluvia fina va calándonos hasta los huesos. Y, por el camino de diluir nuestra catalanidad, nos va haciendo cada día un poco más españoles’.
Pues, tiene toda la razón y más. Estamos perdiendo nuestra identidad. Y una cosa es sentirnos también españoles, y otra dejar de ser catalanes. El problema no es compartir culturas. El problema es cuando una cultura destruye a otra. Y por ese camino vamos. Pobre catalán, y pobre Cataluña!
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Rahola y otros melancólicos no lloran porque se queden unamunaniamente sin identidad, sino porque sus expectativas ideológicas chocan contra los hechos duros y puros: pretender cohesionar una sociedad plural como la catalana entorno al tótem de la nación es tan improbable como pretender unir a todos los catalanes entorno a la religión católica. Si esto último nadie lo pretende, ¿por qué se pretende lo primero? Pues porque la nación se ha convertido es la religión de los que ya no creen en Dios.
Lo malo de la nación es que no habla más que por sus intermediarios que son los nacionalistas. Y, yo, la verdad, no me fío de Rahola ni de Soler (el intelectual de cabecera del nacionalismo) ni de todos esos patriotas que hacen nacionalismo catalán en castellano en La Vanguardia; ni tampoco de los que me imponen la inmersión lingüística en una de las dos lenguas de Cataluña, mientras ellos envían a sus hijos a colegios internacionales. La inmersión, a fin de cuentas, no es más que una forma de violencia simbólica ejercida contra una parte de la población para dejar claro quién manda en Cataluña.
¿Identidad? ¿Cuál de ellas? La identidad de muchos está más cerca de su opción sexual, religiosa, o de su filiación familiar o futbolística que de algo tan inefable como la catalanidad.
Rahola&Co son los curas que se quedan sin parroquia y por tanto sin sueldo; lloran por su hipoteca, no por la nación, que ni los ha llamado ni los necesita.
R. la dialéctica de culturas es una farsa como el relativismo cultural, sencillamente porque no las culturas sustantivas no existen, o sino dime, ¿en que se diferencia un pijo de Pedralbes, otro de Neguri y otro del barrio de Salamanca?, ¿y un currante de Sant Boi, otro de Getafe y otro de Sestao?. Lo único que sucede es que el discurso de las culturas ha sustituido al de las razas.
Egarense ha dado en la diana.
La política catalanista, ha pretendido suprimir a los “ex-católicos” por la “nueva liturgia del Nacionalismo”.
Lo religioso, ya era algo superado ¡¡menos mal!!.
Pero lo “Nacional” ¡¡vendía muy bién!! ¡¡y se compró mejor!!
A la Sra. Rahola, como a su “parroquia” les ha ido de maravilla con el nuevo negocio “pseudo-religioso-nacionalista”. Y les han caído unos buenos dividendos.
Las mentiras de una “Parroquia Católica” y las similitudes de la “Nueva Parroquia Catalanista” persiguen el mismo fín: Poder, Dinero y Adoctrinamiento. ¡¡Cómo suena ésto último!!
Pero, la venta y distribución en la época actual, dispone de unas herramientas y canales: TV-3, CAT Radio, y demás acólitos, que hacen superior la llegada del mensaje de la “catalanísima” de forma mucho mas eficiente.
Por suerte, aún hay quien tiene la fortuna de: “Comparar” y “Si encuentra algo mejor, cambiar”…
Un saludo a todos.
Egarense da siempre en la diana. Mis felicitaciones.
Sobre todo a ti que sales en todos los programas de debate ESPAÑOLES……..FELICES FIESTAS PILAR!
Xurde Rocamundi http://ciutadansarenys.blogspot.com