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‘¿Por qué Companys es el “president màrtir? Algunos creerán que por fue por la forma y circunstancias en que murió. Pero en realidad Companys forma parte de ese imaginario catalán según el cual no puede haber catalanes malos –entiéndase, en este caso, franquistas- y que la Guerra Civil no fue también una guerra entre catalanes sino exclusivamente una guerra de España contra Catalunya’
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Manuel Trallero, escritor, el 20 de octubre de 2008 en su blog:
‘Y aquí empezó a construirse el mito que concluyó en “el president màrtir”. Porque obviamente Companys era el presidente de una parte de los catalanes, mientras que otros —tan catalanes como los primeros— combatían en las filas del general Franco (véase, si no, al tan homenajeado Martí de Riquer) y por Companys no debían sentir la más mínima simpatía. Dejando aparte que se sublevó contra el régimen legalmente establecido —els fets dels 6 d´octubre— fue responsable de la matanza de ocho mil religiosos llevada a cabo en la retaguardia por unos supuestos “incontrolados”, ya que él era el máximo responsable del orden público.
[…] ¿Por qué Companys es el “president màrtir? Algunos creerán que por fue por la forma y circunstancias en que murió. Pero en realidad Companys forma parte de ese imaginario catalán según el cual no puede haber catalanes malos –entiéndase, en este caso, franquistas- y que la Guerra Civil no fue también una guerra entre catalanes sino exclusivamente una guerra de España contra Catalunya. Por ello se pide que España —la España democrática— pida perdón por un crimen cometido precisamente por los fascistas que acabaron con la España democrática, una verdadera paradoja, o que se anule el juicio que condenó a Companys porque de esta forma se pretende cambiar el resultado de la historia’.
Sr. Trallero, estoy de acuerdo con Vd. pero digo algo más. Company era un esquizofrénico, su carácter indolente, acomodaticio y arrático le llevó a la situación en que finalmente se encontró. Desde Agosto del 36 no pintaba nada, no era nadie, perdió el gobierno a manos de los grupos Anarquistas y de la UGT, luego se los Comunistas del POUM y del PSUC, finalmente del Gobierno Central que lo desposeyó de toda autoridad si alguna le quedaba. De todas amenras aún así, nada hizo por su pueblo, todo lo contrario, se dedicó a machacar, reir y acomodarse a los tiempos y convivir con los asesinos que pululaban por las calles. Su frase al cruzar la frontera y encontrarse con un cura disfrazado, de “pero aún quedan de estos, yo creía que los habíamos eliminado a tods” dicho en plan chirigota, refleja la maldad y el carácter del indivíduo. No sé a que viene restituirle nada. No se merece ni un escupitinajo.
Si los nacionalistas (?) -cosa curiosa de algo que jamás ha sido nada- quieren tener un icono, allá ellos, pero la gente culta no nos tragamos ni nos la hemos tragado nunca la “bola” de Companys. Por decir algo concreto, de los consejeros de la entonces Generalidad de Cataluña con sentido y visión el único que se salvó fué Tarradellas, que por cierto, tenía muy poco aprecio por Companys. De hecho una frase es suya “…a ese que lo dejen como está”, tanto es así que no quería ver a su lado a nadie de ERC, gente que durante el franquismo se dedicó a hacer cuatro pesetillas acomodándose a las circunstancias y sin levantar jamás la voz. “Cosas veredes Nicomedes”.