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‘El principio podría aplicarse hasta el infinito. Si Cataluña tiene derecho a que se le devuelva la mayor parte de lo que allí se recauda, ¿por qué ha de negársele a Lérida el mismo derecho y obligarle a aceptar que sea la Generalidad en Barcelona la que decida qué se hace con lo recaudado en aquella provincia?’
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Emilio Campmany, columnista de Libertad Digital, el 11 de julio de 2008:
‘Después de aprobado el estatuto, los que lo denunciamos tuvimos que aguantar mil burlas en las que se nos venía a decir: “¿Lo veis? Ya se ha aprobado el estatuto y no ha pasado nada; España no se ha roto y todo sigue igual.” No fueron sólo los socialistas y los nacionalistas los que así nos sermonearon. Merece la pena recordar que Antonio Hernández Mancha publicó en El País un artículo con el tranquilizador título de España no se rompe.
Sin embargo, en cuanto se ha empezado a ejecutar el estatuto, han comenzado a abrirse las primeras grietas. Nada bueno puede traer que la política de inversiones dependa de las balanzas fiscales. España va a acabar siendo una especie de Unión Europea de la señorita Pepis donde el futuro de los ciudadanos de cada región ya no dependerá de lo que se debata en las Cortes, sino de las reuniones anuales en las que los presidentes autonómicos acordarán cuánto dinero van a poner las regiones ricas y cuánto van a recibir las pobres.
El principio podría aplicarse hasta el infinito. Si Cataluña tiene derecho a que se le devuelva la mayor parte de lo que allí se recauda, ¿por qué ha de negársele a Lérida el mismo derecho y obligarle a aceptar que sea la Generalidad en Barcelona la que decida qué se hace con lo recaudado en aquella provincia? No sólo ella, sino que también los de Sabadell deberían poder reclamar cuando crean que reciben muy poco a cambio de lo que pagan y se sientan agraviados al ver que la Generalidad se hincha a hacer inversiones en Mataró.’
Jo penso que ja estan ven gestionats els impostos i que canviar d´administració no aportaria res sino que mes desigualtats, penso que la mala gestió es de la Generalitat que gasta massa i es aqui on es produeixen les desigualtats,gastant els calers en embaixades sense competencies i organitzacions soposadament culturals el funcionariat que cobra un 40% més que el de la resta de l´Estat pel mateix servei.A veure si ens adomem que ens roben els d´aqui.