RevistaWeb
‘La rebelión de Air Berlin contra la imposición lingüística ha sido un brote excepcional en el páramo de la sumisión absoluta’
[&hellip
Cristina Losada, el 9 de junio de 2008, en Libertad Digital:
‘El director general de Air Berlin vivía hasta hace poco en el error. Pensaba el hombre que habitaba en una Europa sin fronteras, “una Europa en la que cada uno puede preservar sus peculiaridades culturales, pero en la que se sitúa en primer plano lo que une y no lo que separa”. Además, tenía la certeza de que eran él y los accionistas quienes mandaban en la empresa. Pues no. No en España. La jefa de la policía lingüística de Baleares se lo hizo ver con claridad meridiana. Aquí, señor Hunold, se exalta la diferencia y se erradica la semejanza, y en las empresas es el Gobierno [autonómico] quien manda. Más aún, si uno se resiste a someterse a sus dictados, le llaman “nazi”, lo cual, proferido por un nacionalista, sea un asaltapiscinas o un asaltapresupuestos –condiciones que no son excluyentes– es como si unos fascistas le llamaran “facha”.
Ocurre que los nacionalistas de España están muy mal acostumbrados. Durante décadas, esa ínfima minoría en términos electorales, ha podido hacer y deshacer a su antojo. Deshacer, ante todo. Es sabido que han deshecho con el consentimiento de los dos grandes partidos y últimamente con la colaboración plena del PSOE, pero se olvida con frecuencia a los múltiples cooperadores necesarios. Millones de personas, sólo sobre el papel ciudadanos, han aceptado sin rechistar la pedagogía del odio, el empobrecimiento cultural, la reducción de la libertad y la vulneración de derechos que el nacionalismo ha entronizado. Y al frente de esa nutrida legión de la cobardía cívica, ha estado siempre la plana mayor y mediana del poder financiero y económico. La rebelión de Air Berlin contra la imposición lingüística ha sido un brote excepcional en el páramo de la sumisión absoluta.
De manera que los nazis españoles se han abalanzado contra el disidente extranjero con las armas que tan buen resultado les han dado en estos lares; esto es, le han acusado de menospreciar la cultura catalana y le han hecho chantaje. No otra cosa es la advertencia del Gobierno de Montilla de que Air Berlín debe anteponer “los resultados económicos” de su empresa a los “posicionamientos ideológicos”. Pues ha de saber el señor Hunold, quien pensaba también, ingenuo él, que vivía en una Europa libre, que expresar ideas que colisionen con las nacionalistas puede tener graves consecuencias económicas. Esta es la razón por la que se han mantenido tan silentes y obedientes los heroicos empresarios españoles y por la que ha tenido que ser él, empresario de un país que conoció el desvarío nacionalista a fondo, quien diga en alta voz que ese rey está desnudo.’
BUENA ACLARACION CRSITINA. . .Gracias por denunciar lo que la mayoría de Baleares diariamente denunciamos en nuestros foros y en la calle, de la barbarie que están haciendo estos cuatro políticos por decir algo en nuestra comunidad, la que menosprecian porque no es la suya sino que crean la guerra en la casa de sus vecinos, en beneficio propio. . .Tienen amedrentados a nuestros políticos porque están todos envueltos en casos presuntamente deshonestos, que se están investigado por la fiscalia anti-corrupción y el poder judicial. . .No se dan cuenta el daño que están haciendo al SECTOR TURISTICO, el que nos da el pan de cada DIA 365 días al año y que de hecho solo nos falta que se metan en las compañías privadas que operan en nuestra comunidad para desviar insofacto el resto de turistas que nos quedan. . .Como ha intervenido el Sr. Montilla, el moroso de los 1000 mill. De deudas a “La Caixa”, debemos pensar que quiere desviar estos turistas a la Costa Brava que mucha falta les hace, con el precio les van a incluir apagones eléctricos, atascos en carreteras, problemas en los are puertos, falta de agua potable y un sin fin de calamidades que han tenido que soportar los Catalanes y mientras este el de Presidente y el tripartito seguirán, seguirán y seguirán. . .Saludos cordiales MI GA JA